De repente, mientras el Bara retoza en el sanatorio y el Madrid enciende puros, llega Kylian Mbapp y en una medida de contraprogramacin recuerda en un comunicado a su compaa petrolfera que el nombre correcto de la empresa no es ‘Kylian Saint-Germain’.

Mbapp, un cometa sin destino en abril, le ha hecho un guio involuntario al ftbol universitario y colegial, aquel en el que los nombres de

los equipos aparecan lesionados de origen

porque muchos se haban gestado en tardes en bares de Moncloa con ms rondas que la historia de la Champions.
En las competiciones, donde algn insensato todava pensaba que iba a ser un figurn del baln, participaban

el Nottingham Flores, el Maccabi de Levantar, el Atltico Jones, el Tuercebotas United, el Drink Team, el Estoque City y engendros as,

que explican el actual estado de la sociedad civil porque aquellos individuos estudiantes se hicieron mayores.

Vio correr a Modric

No se sabe qu ha enfadado ms a Mbapp, si un anuncio de marketing del PSG sobre nuevos abonados o ver a Modric corriendo como si estuviera a punto de subir al primer equipo

. Los ltimos meses de la lnea de alta velocidad del equipo parisino son una pelcula de terror, con la peripecia de hacer cuatro goles en la final de un Mundial (incluido el penalti de la tanda) para terminar viendo a Messi pulsando el timbre del cielo.

Un comunicado as slo lo puede hacer alguien que se siente muy poderoso.

Haba una forma discreta de proclamar el malestar y otra, estruendosa, de que lo supiera el planeta. En el ftbol moderno lo habitual es elegir la segunda. El desahogo se puede interpretar como un aviso, una peticin de recepcin con Macron o el primer paso hacia otra renovacin.

Mbapp pas unas malas horas con la industria audiovisual. Primero con el del 0-4 del Camp Nou

y luego con el del PSG antes de que se renombre como Kylian Saint-Germain. Ni en Moncloa se llegaba a ese nivel de chispa.